La Universidad llevó adelante su tercer proceso de autoevaluación institucional, que culminó con la elaboración de un informe integral presentado ante la CONEAU (Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria). Este trabajo se realizó conforme a lo establecido por el artículo 44° de la Ley de Educación Superior, que requiere que las instituciones universitarias desarrollen procesos de autoevaluación complementados con evaluaciones externas, con el fin de identificar fortalezas, debilidades y oportunidades de mejora que garanticen la calidad académica e institucional.
A lo largo del proceso participaron estudiantes, docentes, egresados, directivos y personal no docente, quienes aportaron sus perspectivas y experiencias a través de talleres, entrevistas, encuestas y el análisis de diversas fuentes internas de información. Esta participación plural permitió construir un diagnóstico profundo y representativo del funcionamiento institucional y de sus principales desafíos.
Los resultados obtenidos dieron lugar a un informe que abarca todas las dimensiones de la vida universitaria, incluidas la gestión, la docencia, la investigación, la extensión y la infraestructura. Además de sintetizar los hallazgos del proceso, este documento funciona como insumo estratégico para el desarrollo de planes de mejora que se traducen en proyectos concretos orientados a fortalecer y promover la continuidad del crecimiento institucional.
En la etapa siguiente, los pares evaluadores designados por la CONEAU visitarán la Universidad para entrevistarse con los distintos participantes del proceso. Su intervención permitirá validar las fortalezas y debilidades detectadas y acompañar el desarrollo de las acciones de mejora previstas, garantizando así la consolidación de una cultura institucional orientada a la calidad y la mejora continua.